Casper Schwarz y su estudio han buceado en nuestros sentimientos para diseñar un hospital que parezca cualquier cosa menos un hospital. Se trata de un centro especializado en cáncer de mama, por ello preguntas relacionadas con cómo se sentirán las pacientes al ingresar estuvieron en su mente desde el principio del proyecto. Partir de la experiencia humana y no pensar en los aspectos típicos de un hospital ha sido la clave.
Según C4ID Interieurarchitecten un buen diseño de interiores debe trasmitir confianza en el equipo médico y mostrar la importancia que éste da a sus pacientes.
Al ingresar las pacientes son recibidas por un hall cuyas dimensiones están estudiadas para no intimidarlas. Y para que se sientan como en casa, qué mejor que una confortable y cálida selección de mobiliario. Aquí es donde Sancal juega un papel destacado con los sofás Float y los cojines Cairo diseñados por Karim Rashid.
Cada consulta recrea una atmósfera diferente y recibe el nombre de una mujer ilustre, como por ejemplo la física Marie Curie o la antropóloga Jane Goodall entre otras.
Son proyectos como este los que permiten explicar fácilmente a alguien ajeno a la materia el poder de la arquitectura de interiores y el diseño de mobiliario. El hecho de que las herramientas médicas no estén nunca a la vista y que las pacientes puedan olvidar por unos momentos que están ingresadas en el hospital, da sentido a nuestro trabajo.
Imágenes por Han Nooijen.
