Dos empresas referentes en mobiliario tapizado, SANCAL y FAMA, se asocian con CETEM en materia de innovación para dar con nuevas soluciones que reduzcan el impacto ambiental de este sector mediante un planteamiento de Economía Circular.
En lo que al sector del mueble se refiere, Yecla aglutina una gran concentración de grandes empresas del sector, dando lugar a uno de los clústeres más importantes a nivel nacional e internacional. Dentro de éste, SANCAL y FAMA son dos referentes del mobiliario tapizado con garantías de calidad, diseño y vanguardia. Ambas empresas tienen conciencia del impacto que su actividad tiene en el medio ambiente y están preocupadas por evolucionar hacia modelos productivos más sostenibles, con un enfoque de Economía Circular y buscando la minimización al máximo de sus residuos, teniendo en el punto de mira el objetivo Residuo Cero.
Con dicho propósito y aunando intereses nace el proyecto U2: Upcycling the Upholstery, una iniciativa de las dos empresas, a la que se incorpora CETEM para dar cobertura en el campo de la I+D durante el desarrollo del proyecto, y que cuenta con el apoyo financiero del programa Desafíos I+D del gobierno regional a través del Instituto de Fomento de la Región de Murcia y con la cofinanciación de los fondos FEDER
Con U2 (Upcycling the Upholstery) se persigue alcanzar un nivel de mejora y aumento del porcentaje de materia prima empleada en la fabricación de mueble tapizado, abordando diferentes estrategias a corto, medio y largo plazo. Se trata de un proyecto desafiante y ambicioso, pero en el que creemos y apostamos para que en unos años sea una realidad en el sector, pudiendo alcanzar una industria con menor huella de carbono, que evolucione de la mano de los pilares del Green Deal, convirtiéndola en más sostenible y menos contaminante.
Pero ¿qué es realmente U2 Upcycling the upholstery?
Actualmente SANCAL y FAMA han logrado alcanzar un alto porcentaje de reciclaje de los residuos que generan; es normal encontrar materiales valorizados, es decir, que se pueden reciclar, como por ejemplo la madera, la espuma de poliuretano, la fibra o el plástico. Sin embargo, los tejidos conocidos como polipiel o símil piel, materiales que pueden estar componer poliuretano o PVC, no se pueden reciclar como el resto de los tejidos. Esto es debido a su composición que está formada por varias capas de materiales distintos: suele llevar una base de tejido, a la que se adquiere una capa de PVC o poliuretano encima, lo que lo convierte en un material muy difícil de reciclar.
En este contexto de dificultad se ha planteado un proyecto con varias estrategias de desarrollo: en primer lugar, se priorizó un modelo de producción que optimice al máximo el material empleado, reduciendo así los residuos generados. A continuación, se planteó la posibilidad de reutilizar estos retales o recortes resultantes del proceso de producción de sofás para que sirvan de base para fabricar otros productos por parte de ambas empresas.
Pero llegados a este punto los participantes en el proyecto se plantearon: ¿y si fuéramos capaces de separar la base de estos tejidos de su capa superior plástica y conseguir así facilitar su reciclaje? Y ahí es donde entra en juego la investigación en los laboratorios pues se necesita desarrollar un método viable para separar el plástico del tejido.
El proyecto U2 ya ha alcanzado el ecuador de su tiempo de desarrollo y se han realizado los primeros tratamientos a estos residuos con distintos productos químicos que no sean contaminantes, con el fin de encontrar la forma de separarlos sin que tengamos que utilizar más energía de la necesaria. En este momento, U2 se encuentra en fase de laboratorio, nuestro objetivo más cercano es conseguir un procedimiento químico y/o híbrido, porque es importante destacar que también se están abordando las vías más punteras como la es la combinación química + biotecnología, que funcione en las probetas a pequeña escala, para después comenzar a trabajar en encontrar la forma adaptar y trasladar todo o parte del conocimiento desarrollado en el laboratorio a una escala proceso piloto y posteriormente industrial.
No tenemos la certeza de que podamos conseguir los objetivos planteados, la investigación es así, se trata de conseguir experiencias que nos aporten nuevo conocimiento, pero por encima de todo es una satisfacción indescriptible el poder trabajar mano a mano entre profesionales comprometidos con el medioambiente como SANCAL, FAMA y CETEM, sabiendo lo bonito que es el objetivo que estamos persiguiendo.
El mantenimiento en buenas condiciones de nuestro medioambiente depende de pequeños pasos como estos, que sumados, son los que van a hacer que podamos dejarles a nuestros hijos un planeta mejor.