El oficio de chapista se convierte en el puente entre industria y arte, para transformar un producto de manufactura en 12 piezas únicas.
Sancal y el estudio valenciano MUT, formado por Alberto Sánchez y Eduardo Villalón, reinventan las mesas Canto en una serie de edición limitada que desafía los límites entre el diseño y el arte.
CANTO Art Edition parte de una reflexión. ¿Cuál es la línea que separa el diseño del arte? ¿Existe realmente esa línea en el momento de creación? En esta colección, MUT explora esa frontera difusa al intervenir artísticamente una pieza funcional, transformando un objeto cotidiano como es una mesa en 12 piezas únicas.
El título de Chapa y Pintura es un guiño a lo que ocurre en un taller de reparación de coches, donde el metal, la pintura y la lija devuelven el lustre a la carrocería de los vehículos. Esta técnica también es la de esta edición limitada, pues los diseñadores aplican este mismo proceso manual, una por una, para que cada una de ellas sea única.
Aunque el proceso es tradicionalmente un acto de reparación, donde lo estropeado e imperfecto se convierte en algo nuevo, reparado, para esta edición especial, los diseñadores invierten el proceso. Las mesas Canto, con una terminación impecable, son transformadas por los diseñadores para descubrir la esencia de su construcción y materiales. Originalmente elaboradas en DM lacado, ahora presentan un proceso meticulosamente trabajado por capas de color que se dejan entrever al lijar su superficie hasta llegar a la propia materia prima en la que están fabricadas. El resultado es una pieza visualmente impactante que combina la fuerza industrial con una estética psicodélica.
Detrás de cada obra siempre hay una historia que la arropa, y en el caso de la CANTO Art Edition, esta forma parte de los recuerdos de juventud de Eduardo y Alberto, cuando visitaban el taller de reparación de automóviles Villalón. Es fascinante cómo esas memorias se convierten no solo en una fuente de inspiración, sino también en el punto de partida para experimentar y aplicar técnicas ya existentes y obtener nuevas estéticas.
Chapa y Pintura nos recuerda que el diseño puede ser profundamente personal. Un acto voluntario que trasciende lo funcional, conectando lo industrial con lo emocional, el pasado con el presente.
También es una muestra de la madurez creativa de los valencianos, pues exploran formas de expresión más personales a través de la creación artística. Así pues, con el proyecto Bruto se internan en los entresijos de una obra más experimental con piezas producidas en ediciones muy limitadas.
Para Sancal es una forma muy atractiva de romper de nuevo moldes e invitar al público a reconsiderar los límites del diseño, conectándolo con el arte y con un oficio que aparentemente poco tiene de artístico.
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